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Fotografía donde se ve cómo la pasajera llora porque le piden bajar del avión.Fotografía donde se ve cómo la pasajera llora porque le piden bajar del avión.

Piden a pasajera de Viva Aerobús bajar del avión con su perro de apoyo emocional

La mascota, nerviosa y cansada, se quitó el bozal y no dejó que su dueña se lo volviera a poner. Como consecuencia, personal de la aerolínea le pidió a la usuaria que cambiara de vuelo.

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24 de agosto de 2023

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Karina González Fauerman

Parecía un vuelo más de Guadalajara a Ciudad de México. Sin embargo, a bordo del avión, antes de despegar, Carlos Valadez empezó a notar mucho movimiento. Pensó que algún pasajero se había enfermado o estaba en estado de ebriedad.

Durante 45 minutos, ningún personal de la aerolínea Viva Aerobús dijo nada. Resulta que una de las pasajeras llevaba a su perrita (schnauzer miniatura) de apoyo emocional, pero se le cayó el bozal en el asiento. Al no poder ponérselo de nuevo, le pidieron a la dueña que se bajara del avión con su mascota.

«Los pasajeros le dijimos a las azafatas que dejaran al perro a bordo, que no era agresivo y que no había problema en que se quedara. Me pareció muy grosero que, en vez de tranquilizarla, le presionaron para que se bajara en plena crisis».

«Intentamos ponerle de nuevo el bozal al perro, pero fue imposible. No nos dejó, no pudimos controlarlo, ya que se movía muy fuerte», explicó Carlos.

Para difundir esta situación, Carlos subió a redes sociales un video (que en TikTok llegó a 38.9 millones de vistas y fue silenciado por supuestos derechos de autor del audio).

Los comentarios de los cibernautas son divididos: mientras que unos creen que lo correcto era ser empático con la situación, ya que el perro es de apoyo emocional, otros dijeron que es necesario respetar las reglas de la aerolínea, considerar a las personas alérgicas o que, incluso, el can podría haber mordido a los viajeros.

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Así se vivió la polémica

«Me da tristeza que muchas personas no entienden la problemática de apoyo emocional. La chica sí respetó las reglas, pero este es un caso específico. Después, cuando platiqué con ella, me dijo que desde el mostrador la empezaron a tratar mal; el perro estaba estresado de tantas horas de espera con el bozal. Al subir al avión, se lo quitó porque estaba incómodo y cansado. La aerolínea nunca se separó de la viajera y la presionó todo el tiempo para que la mascota portara el bozal».

La página de Viva Aerobús señala los siguientes requisitos para viajar a bordo con un perro de apoyo emocional:

  • Presentar receta médica en hoja membretada emitida por una institución o médico especializado en salud mental (psicólogo o psiquiatra) que acredite que el pasajero debe viajar con un animal de apoyo emocional. La receta deberá contener:

    • Nombre completo del pasajero

    • Nombre, cédula profesional y firma de quien emite el documento 

    • Fecha de emisión (Máximo un año antes de la fecha del vuelo)

  • Si el animal viaja fuera de una transportadora, deberá portar correa, arnés y placa de identificación, y portar bozal durante el vuelo (no explica tipo arnés)

En caso de que no cumpla con estos requisitos, podrá ser transportado como mascota en carga y el pasajero deberá cubrir los costos adicionales.

Tacto: elemento clave

Desde el punto de vista de Silvia Lozada Badillo, presidenta del Patronato de Escuela para Entrenamiento de Perros Guía Para Ciegos (Institución de Asistencia Privada), la aerolínea hizo lo correcto al pedirle a la pasajera que bajara cuando el perrito se quitó el bozal. Sin embargo, debieron actuar con más amabilidad y tacto al solicitárselo, para que ambos pudieran calmarse, resolver la situación y después abordar otro vuelo.

«Algunos perros de apoyo emocional han agredido en aviones y aeropuertos a perros de asistencia y a pasajeros. Es un riesgo porque hay personas que abusan de la gratuidad para perros de apoyo emocional y utilizan certificados obtenidos de manera deshonesta para subir con sus mascotas a los aviones. Por eso las aerolíneas se han puesto muy estrictas para el transporte de estos perros”.

Lozada afirma que los perros de apoyo emocional no son perros de asistencia y no tienen el mismo entrenamiento especializado; a veces incluso no tienen ningún entrenamiento, por lo que su comportamiento puede ser impredecible.

«A los usuarios de perros de asistencia nos ha llevado años lograr una legislación que establezca el derecho a entrar a transportes y lugares públicos. Los perros de asistencia, por su entrenamiento por más de dos años y especializado, nunca deben llevar bozal y deben viajar en todo momento con su usuario con discapacidad”, expresa Lozada.

¿Cómo manejar una crisis?

De acuerdo con el Consejo Ciudadano, para manejar una crisis emocional es necesario:

Identificar tus emociones. -Respirar profundamente. -Tratarte con respeto y amabilidad.  -Conectar con redes de apoyo.  -Llamar a líneas telefónicas de ayuda emocional.  -Buscar ayuda profesional si la situación afecta tu vida diaria. 

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