El 10% de las personas con discapacidad que vive en algún país de la OCDE
gasta 4 de cada 10 pesos de sus ingresos en vivienda. La falta de información, adecuaciones y financiamiento es casi parejo en todos los países miembros.
El primer paso que regularía la asistencia sexual fue dado; faltan procesos de dictaminación y consulta para que la iniciativa sea discutida con amplitud y profundidad.
Quien cuida a una persona con discapacidad debe considerar su propio cuidado como parte de un todo y no abandonarse, pues corre el riesgo de enfermar también.