Tras 20 años de operar como referente para la atención de personas con discapacidad, una inesperada e inexplicable decisión de gobierno lo integrará a una dependencia que aún está en proceso de creación.
El primer paso que regularía la asistencia sexual fue dado; faltan procesos de dictaminación y consulta para que la iniciativa sea discutida con amplitud y profundidad.
Quien cuida a una persona con discapacidad debe considerar su propio cuidado como parte de un todo y no abandonarse, pues corre el riesgo de enfermar también.