Sin duda, el imperio otomano fue uno de los más poderosos de la historia de la humanidad pero poco se sabe de los desórdenes mentales que infringieron a sus príncipes ni por qué su Palacio en Constantinopla tenía tanto personal con discapacidad auditiva.
El primer paso que regularía la asistencia sexual fue dado; faltan procesos de dictaminación y consulta para que la iniciativa sea discutida con amplitud y profundidad.
Quien cuida a una persona con discapacidad debe considerar su propio cuidado como parte de un todo y no abandonarse, pues corre el riesgo de enfermar también.