Logotipo de Yo También

Terapia Ocupacional: la oportunidad de colaborar

Más allá de la recuperación de las habilidades físicas, el acompañamiento de las personas con discapacidad por un experto en Terapia Ocupacional se traduce en independencia, confianza en sí mismas y autoestima.

Ícono de calendario

27 de octubre de 2022

Ícono de autor

Redacción Yo También

A lo largo de mis 15 años como terapeuta ocupacional la pregunta obligada siempre ha sido ¿qué es la terapia ocupacional? Y acompañada de esta, la típica ¿por qué decidiste estudiar eso?

Aunque en México no es una profesión nueva, sí es poco reconocida como una disciplina del área de la salud, y muy confundida con programas para «entretener” sin que, salvo muy pocas personas, tengan información sobre su presencia en el país.

Si habláramos de las primeras apariciones de la terapia ocupacional en México nos remontamos al año 1910 en el Hospital Psiquiátrico “La Castañeda”, donde se implantó la Terapia Ocupacional (TO) como un concepto aún artesanal pero con una serie de hábitos y ocupaciones para los pacientes. 

Y pasan más de 30 años, hasta 1942, cuando el Hospital Español abre un amplio programa de Terapia Ocupacional, y para 1955 se crea el Centro de Rehabilitación Músculo Esquelético, antes llamado Centro de Rehabilitación No. 5 para preescolares con secuelas de polio. 

Paralelamente, se crea el primer departamento de Terapia Ocupacional e inician los cursos de Terapia Ocupacional y Terapia Física con duración de un año. Y, en 1964, el Instituto Nacional de Protección a la Infancia (INPI, ahora DIF) inicia los cursos técnicos de Terapia Ocupacional y Terapia Física de 2 años, teniendo como requisito básico la secundaria.

El 20 de marzo de 1997 se fundó el Instituto de Terapia Ocupacional (ITO).  Y dos años más tarde en 1999, el Colegio de Terapeutas Ocupacionales de México.

Algunos de los acontecimientos más destacados en nuestra profesión suceden en el periodo 2007-2008, cuando se inicia el primer Programa de Profesionalización en el Instituto de Terapia Ocupacional, dirigido por la Dra. María Cristina Bolaños, con la finalidad de elevar el nivel profesional de técnico a licenciatura. Para ello, diseñaron el programa de acuerdo con los estándares internacionales establecidos por la Federación Mundial de Terapeutas Ocupacionales (WFOT).

Referente terapéutico 

Al paso de los años, la terapia ocupacional en México ha cobrado relevancia y se ha vuelto  un referente terapéutico para las personas que tienen alguna discapacidad.

Para mí, ser terapeuta ocupacional es una maravilla, amo lo que hago como TO, cómo nos llaman en cortito; pues de primera instancia me encanta poder ayudar a alguien y que esto se vea reflejado en que tenga más independencia, mayor funcionalidad o una mejor calidad de vida.

Podría enumerar mil cosas por las que elegí esta profesión; en primer lugar porque colaboras (no me gusta el término trabajas) con una persona, con un ser humano, no tanto con un diagnóstico (aunque nunca se deja de lado, aclaro). Pero lo más importante es centrarse en la persona, en sus necesidades y en su familia. Cuando empiezas a ver que lo más importante es la persona, como TO comienzas a analizar y elaborar tus objetivos y planes terapéuticos para ayudarle.

Si lo vemos desde un punto de vista general: buscamos la máxima funcionalidad e  independencia en las personas con alguna discapacidad física, cognitiva, conductual o intelectual. Esto quiere decir que promovemos algo que es fundamental en las personas: el  valerse por sí mismas, tomando como potencializadores todo lo que sí pueden hacer y, de esta manera, llevarlas a la autonomía dentro de sus capacidades, en sus actividades diarias.

Los profesionales de terapia ocupacional contamos con conocimientos de salud y rehabilitación. De esta manera podemos ejercer nuestra profesión en diferentes espacios, cómo son hospitales, centros de salud, de rehabilitación, de trabajo, domicilios/consultorios particulares, escuelas, institutos, centros ocupacionales o residencias para adultos mayores.

En este 27 de octubre, cuando se conmemora el Día Mundial de la Terapia Ocupacional, parece deseable que todos puedan conocer esta profesión y reconocer la importancia de tener un terapeuta ocupacional en más espacios, formando parte de los diferentes equipos tanto en el área de la salud cómo en el contexto escolar.

Siempre he pensado que recuperar las habilidades físicas es importante, pero ¿qué hay de la independencia? ¿Qué hay de sentirse productivo? ¿Qué sentimientos les provoca ser autónomos, tener individualidad, autoestima y confianza? 

Entonces creo fielmente que ahí radica la gran importancia de la terapia ocupacional, en adquirir, mejorar, conservar o recuperar esas capacidades funcionales que nos permitan llegar a la independencia y a sentirse productivos.

Por Claudia López García*

* Claudia López García es especialista en Terapia ocupacional en pediatría, terapia ocupacional en alteraciones neurológicas, Evaluación e intervención en desórdenes de procesamiento sensorial y Estimulación temprana. Correo: [email protected]  Facebook: Grupo Terapeutico en Rehabilitación.