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Fotografía de tres personas usando un chaleco protector color naranja parados en fila, en medio, una mujer en silla de ruedas.Fotografía de tres personas usando un chaleco protector color naranja parados en fila, en medio, una mujer en silla de ruedas.

Avanzar hacia una sociedad con menor desempleo para pcd

Impulsar un mercado laboral inclusivo tiene enormes ventajas que llegan no solo a quienes son contratados, sino que permean a la colectividad y son medibles en términos del crecimiento del PIB

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9 de octubre de 2020

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Conversa

Por Ivett Rangel

Más de mil millones de personas en el mundo tienen alguna discapacidad, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). De esa cifra, el 80 por ciento está desempleado, de ahí que surjan iniciativas como el conversatorio «Retos y soluciones para la empleabilidad digital de personas con discapacidad», organizado por GINclúyete, parte del Business for Inclusive Growth.

GINclúyete, de GIN Group, es una plataforma de servicios profesionales para la inclusión laboral de personas con discapacidad.

En el conversatorio se reconoció que los gobiernos no pueden por sí solos crear las estrategias necesarias para promover un crecimiento inclusivo, por lo que la iniciativa privada resulta fundamental para conseguirlo. 

Sin embargo, hay que trabajar con el gobierno, sin el gobierno y a pesar del gobierno, se mencionó durante el foro virtual, donde se abordaron temas de forma general y sin llegar a compromisos particulares.

Ahí destacaron que la pandemia representa un reto extra para emplear a las personas con discapacidad pero, al mismo tiempo, ofrece una oportunidad a aquellos que estén interesados en el teletrabajo pero que no pueden desplazarse por sí solos. 

«En América Latina no contamos con la estructura para que puedan desplazarse, por lo que hay que fomentar el trabajo a distancia. Incluso, exportar los talentos de un país a otro», expresó Gabriela Soulé, vicepresidenta de GINclúyete

Las personas con discapacidad, agregó, son parte importante de la sociedad para generar riqueza. De acuerdo con la OMS, cuesta el 7 por ciento del PIB mantener a esta población desempleada, pero si se le activa puede aportar el 2 por ciento.

Además, tener un empleo mejora su calidad de vida; les da libertad económica, los hace menos vulnerables y les genera autoestima.

En la sesión, en la que participaron más de 50 personas desde distintos países de América, se barajaron varias ideas sin llegar a una resolución precisa. Aquí algunas de ellas: 

– Ofrecer una capacitación para ser insertados en una empresa con un empleo digno sin brecha salarial. Sin capacitación no hay inclusión. Sólo a través de la capacitación se les puede alinear al entorno pospandemia.

– «No sabemos cuánto va a durar esta nueva normalidad, así que hay que darles las herramientas para que tengan acceso a la tecnología».- Hay que generar acciones para tener acceso a hardware y conectividad al mínimo costo que les permita acceso a empleos en línea teniendo en cuenta las habilidades e intereses de cada individuo.

– Crear una conciencia auténtica en las empresas respecto a que sí es negocio contratar personas con discapacidad porque son personas muy comprometidas y hay menos rotatividad. «Que entiendan que no es por incentivo fiscal o caridad, sino por dignidad».