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Dulce Pontón: 31 años de vivir con dolor crónico

Ella es parte de los bebés que han tardado años en recibir tratamientos paliativos contra el dolor, como sucede con el 98 por ciento de quienes se quedan sin opciones para reducir su sufrimiento.

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17 de octubre de 2022

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Redacción Yo También

En el Día Mundial contra el Dolor, que se conmemora este 17 de octubre, Milenio diario retoma la historia de Dulce, la hija de René Pontón y María Elena Rodríguez, quienes han dedicado su vida a procurarle mejores condiciones para que se desarrolle como contamos en Con dulce vocación.

Y es que la niña, que nació el 14 de septiembre de 1991, tiene hoy 31 años que ha vivido gracias a su esfuerzo y al apoyo incondicional de sus padres, quienes se sobrepusieron a las vacilaciones de los médicos y a los diagnósticos cambiantes que iniciaron con “necrosis de intestino, parálisis cerebral y sordera profunda”, a las que se sumaron artritis reumatoide juvenil y tumores en ovarios.

“Primero me dijeron que nació bien y después me dijeron que no controlaba el calor, que la iban a tener en la incubadora, que no le había trabajado bien el intestino y que la iban a tener en ayuno”, recuerda María Elena Rodríguez en la entrevista con el diario. 

«Después platiqué con otro doctor y me dijo que no debía de ingerir ningún alimento, pero alguien dio otra indicación, le dieron alimento, se le vino una infección que se le fue a la sangre, al cerebro y tuvo enterocolitis necrosante, o sea, le estalló su intestino y se empezó a complicar todo”.

Dulce, desde bebé, se quedó sin opciones para poder expresar su dolor crónico. No lloraba porque su “umbral es calificado de muy alto”; sin embargo, los gestos desgarradores, conforme a la recomendación médica, eran las alertas rojas, el momento justo de acudir a urgencias porque estaba sufriendo más allá de todo parámetro medible en la escala de intensidad común. 

Ella es parte de los bebés que han tardado años en recibir tratamientos paliativos para aliviar el dolor como sucede con el 98 por ciento de los niños que se quedan sin opciones para reducir su sufrimiento, de acuerdo con José de Jesús Salvador Villafaña Tello, fundador y actual presidente de la Fundación Nacional Mexicana de Medicina Paliativa.

Esa realidad que viven cientos de pacientes en México podría agravarse aún más como quedó en evidencia en Me dueles, México, por la falta de medicamentos contra el dolor.

 “Ha sido un reto y sigue siendo un reto porque ella estaba condenada a vivir en estado vegetal, en cama, sin poderse moverse”,

explicó Rodríguez, quien hace una dupla incansable junto a su esposo para enseñarle a su hija a valerse por sí misma en lo posible. 

Por Redacción Yo También