Pelear dos veces

Por Bárbara Anderson

Ser mujer y vivir con alguna discapacidad es cargar con una doble discriminación. 

Las mujeres y niñas con discapacidad las expone 10 veces más a violencia (abusos sexuales, abandono, explotación, malos tratos). 

Muchas no podrán marchar este domingo. Y muchas ya son invisibles desde antes de que se ideara el paro del próximo lunes. 

Valga esta oportunidad para marchar por ellas, cómo invitan estas agrupaciones de mujeres . 

Valga esta efeméride (mucho más combativa que en ningún año previo) para reconocer a quienes hoy siguen luchando doble (por género y por discapacidad) y quienes plantaron estas simientes en el ayer: recopilamos los 49 perfiles de mujeres comprometidas con la inclusión, una galería de historias que vale la pena aplaudir. 

“Cuando ejerzan su privilegio de marchar, recuerden que no estaremos presentes todas, haremos falta varias mujeres con discapacidad ya sea por la falta de un entorno accesible, porque algunas se encuentran institucionalizadas, porque algunas dependen de que alguien más decida si “deben” o “pueden” ir (si a muchas, se nos considera incapaces para decidir ésta y otras muchas cosas)”, dice desde el fondo de su propia condición Mariana Díaz en su columna de Opinión de esta semana. 

Las que podamos marchar y parar, hagamos ese esfuerzo. 

Y también, peleemos dos veces por quienes no pueden pero viven esa doble invisibilidad. 

Este sitio, quienes trabajamos en él y nuestras redes sociales estaremos en silencio y sin actividad el próximo 9 de marzo.

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