Por Redacción Yo También | Fotografía UNICEF
En la educación superior las calificaciones de una persona con discapacidad son muy similares a las de sus pares sin discapacidad.
Esta es la conclusión a la que llegó el estudio “El rendimiento académico de los estudiantes universitarios con discapacidad en España”, realizado por Fundación ONCE.
La investigación se realizó con la información de estudiantes con y sin discapacidad, que fue proporcionada por las universidades españolas durante el ciclo escolar pre pandemia (2018-2019), tanto de quienes cursaban carreras de grado o Másters, tanto presenciales como remotos.
Los estudiantes con discapacidad obtuvieron resultados muy cercanos a los de la población universitaria general en lo que se refiere a la tasa de éxito, es decir los créditos superados y el número total de créditos presentados a examen en dicho curso.
Además, se observó que las diferencias entre el rendimiento académico de los estudiantes con discapacidad y el del conjunto de los estudiantes matriculados en las universidades públicas son menores en los estudios de Máster que en los de grado.
Diferencia de edades
Según la información proporcionada, las personas con discapacidad en estudios de Grado representan el 2.06 por ciento de la población escolar y su edad se ronda los 30 años, es decir, son mayores al promedio general de los estudiantes universitarios de ese país cuyas edades van de 20 a 29 años. En el Máster sucede algo similar, los universitarios con alguna discapacidad tienen 37 años cumplidos, mientras que sus pares sin discapacidad tienen varios años menos de edad.
Las carreras que más estudian
Otro de los descubrimientos de este trabajo está relacionado con las preferencias de estudio de la población universitaria con discapacidad, quienes se inclinan más por estudiar una carrera en el área de Artes y Humanidades y menos en los rubros de Ingeniería y Arquitectura. Asimismo, la población universitaria con discapacidad, al igual que el conjunto del alumnado universitario, presenta patrones diferenciales por género en relación con las ramas de conocimiento en las que se matricula, con una clara feminización de las ramas de Artes y Humanidades y de Ciencias Sociales y Jurídicas, y la masculinización de las Ingenierías.